Año: 2019
8,60€
Blanco multivarietal de la D.O. Valencia con 92 puntos Parker y 90 Peñin.
Agotado
D.O. Valencia
Recuperación de tinajas
Sol, playa y coquinas
Año: 2019
Blanco
ºC
El proyecto inicial de Celler del Roure no contemplaba la elaboración de vinos blancos. En 2006, cuando adquieren una nueva finca (les Alcusses) y poco después ponen en marcha el proyecto de estudio y recuperación del uso de viejas tinajas de la bodega fonda y es entonces cuando nace Cullerot. Según nos cuenta el equipo, las tinajas pronto muestran sus bondades con los vinos blancos. Pureza y frescura, mucha frescura. «Justo lo que necesitábamos», nos dicen. El equipo ha ido recorriendo la comarca en busca de viñedos viejos y con las uvas blancas han tenido más suerte que con las tintas (las que no fueron objeto de las campañas de arranque están muy comprometidas con las cooperativas locales. Actualmente tienen acuerdos con 6 productores que suponen 12 hectáreas de 5 diferentes variedades autóctonas.
La bodega Celler del Roure es una vieja conocida en Vinacos! pues ya hace años tuvimos su Parotet Vermell (ahora ya se llama simplemente, Vermell). Ya entonces nos pareció una bodega que trabajaba una línea distinta a lo que estábamos acostumbrados (algunos vinos hacían su crianza en tinajas de barro) y también nos encontramos con una excelente relación calidad-precio y el apoyo unánime de la crítica. Esto último ha ido creciendo año a año y la realidad es que la última revisión de Luis Gutierrez en el Wine Advocate de Robert Parker fue ya apoteósica. Así que aprovechamos para volver a estar en contacto con la gente del Celler del Roure y nos trajimos este blanco diferencial y maravilloso.
Cullerot significa renacuajo en valenciano y es que el equipo del Celler del Roure lo describe así porque era «un pequeño vino blanco que quería crecer y mejorar en una zona de tintos». Este multivarietal (30% Pedro Ximenez, 30% Macabeo, 10% Verdil, 10% Merseguera, 10% Malvasía y 10% Chardonnay) es un trabajo de recuperación de variedades autóctonas así como de las tinajas originales que formaban parte de la compra original de la bodega. Este blanco tiene una crianza de 6 meses en tinajas de barro de 2.600 litros y se nota ese trabajo de lías, en un vino puro, fresco y delicado. Una elegancia que nos tiene encandilados. Y no somos los únicos, pues la actual añada ha obtenido 92 puntos Parker y 90 Peñín. Maravilloso.